En el Grito de Independencia en Puebla el presidente municipal capitalino, Eduardo Rivera Pérez, fue relegado por el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta durante los 27 «vivas» que lanzó desde el balcón principal del Palacio Municipal.

Al igual que en el gobierno del panista Rafael Moreno Valle, el alcalde permaneció sentado en el Salón de Cabildos mientras el mandatario estatal realizaba su arenga ante el zócalo capitalino.

Hace unas semanas el gobernador anunció que ya no aparecería en eventos públicos con el edil, luego de que fue «destapado» como aspirante a la gubernatura, aunque aclaró que sí estarían juntos en el Grito de Independencia por tratarse de un acto de Estado.
El titular del poder Ejecutivo estatal gritó su arenga solamente acompañado de su esposa, Rosario Orozco Caballero, y hasta después de 27 «vivas», salieron al balcón el magistrado presidente de Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Héctor Sánchez Sánchez, y el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso del estado, Sergio Salomón Céspedes Peregrina.

Momentos más tarde se unió Rivera Pérez para observar el espectáculo de pirotecnia, y así permaneció hasta el final del evento, igual que la esposa del mandatario estatal, un representante de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y otros invitados especiales.
A pesar de que este fue su tercer Grito de Independencia en Puebla, Barbosa Huerta se mostró nervioso al gritar su arenga, e incluso dio la impresión que por momentos la olvidó o la improvisó.

Después de su “viva” número 12, el mandatario de Morena dejó pausas en su arenga, mostrando que había olvidado lo que iba a decir.

“Viva el general, gran héroe en Puebla, Ignacio Zaragoza” fue el viva que se le dificultó, algo similar le ocurrió cuando dijo “que vivan los tres general de la Sierra Norte de Puebla de la época de la ocupación francesa.

Barbosa recordó a diversos personajes históricos como Miguel Hidalgo, José María Morelos, Ignacio Aldama, Josefa Ortiz de Domínguez, Vicente Guerrero, Benito Juárez, Francisco I Madero, Emiliano Zapata y los hermanos Serdán.

Para cerrar gritó los clásicos Viva México, Viva Puebla y cerró con un “que reviva Puebla”.

Lo siguiente fue un espectáculo de pirotecnia de alrededor de 10 minutos que fue observado por el mandatario estatal, su esposa, María del Rosario Orozco Caballero, el presidente municipal, otros invitados especiales y un representante de la Secretaría de la Defensa Nacional(Sedena).

Momentos más tarde el gobernador partió de ayuntamiento para dirigirse a Casa Aguayo en dónde también se realizan actividades como parte de los festejos patrios.

Entre los invitados al evento estuvo el secretario del Partido Acción Nacional, Marcos Castro Martínez; el diputado del mismo partido político, Rafael MicalcoMéndez; el líder estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Néstor Camarillo.

En 2021 los festejos se caracterizaron porque la entonces presidenta municipal de Puebla de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Claudia Rivera Vivanco dio el grito en el Palacio Municipal, mientras que el mandatario estatal encabezó su festejo en Casa Aguayo.

En ese entonces Eduardo Rivera Pérez, ahora presidente municipal, lo acompañó en su arenga; actualmente hay una división entre ellos luego de que el panista fuera destapado como candidato a gobernador.