Desde el 21 de abril, estudiantes de distintas facultades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) iniciaron un paro de actividades en rechazo a la reforma aprobada por el Consejo Universitario, una modificación del artículo 15 del Reglamento Tribunal Universitario que contempla sanciones inmediatas como la suspensión o expulsión por actos de “vandalismo” o “narcomenudeo”.
La modificación al artículo 15, cuya redacción no se había reformado en más de 80 años, se eliminó y sustituyó por un nuevo apartado que permite la aplicación de medidas disciplinarias de suspensión y expulsión inmediata. Sin embargo, causó indignación y fue blanco de críticas por parte del sector estudiantil debido a la ambigüedad en las definiciones de los actos sancionables de “vandalismo”, abriendo la puerta a interpretaciones represivas y arbitrarias.
Cambios en el reglamento no buscan restringir las libertades
El abogado general de la UNAM, Hugo Concha Cantú, aseguró que la modificación al reglamento busca salvaguardar “la libertad creativa y de expresión” al interior de la universidad y que la modificación al artículo 15 no pretende restringir las libertades del sector estudiantil.
Concha Cantú aseguró que los cambios estructurales también están dirigidos al Tribunal Universitario donde las modificaciones aspiran a que el modelo disciplinario tenga una perspectiva de respeto, promoción, protección y garantía de los derechos humanos al interior de la universidad, tal y como lo establece la Constitución Mexicana.
“El artículo establece que cuando se trate de actos de violencia extrema se lleve en el Tribunal todo el procedimiento. No tiene nada que ver con que la universidad quiera criminalizar la protesta. Al contrario, toda la reforma lo que hace es que los derechos de los universitarios –entre otros el de la libertad de protesta, los de manifestación de las ideas y de expresión– estén protegidos y se puedan ejercer de manera correcta” puntualizó el abogado general de la UNAM.
Aunque la normativa fue aprobada, todavía no ha entrado en vigor, pues no ha sido publicada en la Gaceta UNAM, sin embargo, los estudiantes señalaron que sostendrán sus respectivos paros por considerar la modificación del artículo 15 como parte de una irregularidad constitucional ya que «no hay una precisión concreta y se puede prestar a actos de represión».
Estudiantes de al menos cinco facultades se fueron a paro desde el pasado 21 de abril tras la modificación del artículo 15 por el Tribunal Universitario. Aunque las exigencias van direccionadas al mismo rumbo, cada facultad optó por distintos tipos de huelga.
Entre las facultades que oficializaron paro de actividades son Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) plantel Sur, Facultad de Economía, Facultad de Química, Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, entre otras.
Algunas de las facultades anteriores optaron por paro de actividades indefinido, mientras unidades académicas, como la FAD y la FCPyS, optaron por “paros culturales”, en los que se realizan actividades dentro de las instalaciones, pero sin clases.
Al paro de la UNAM se suman más demandas estudiantiles
A la demanda de solicitar la revisión del nuevo artículo 15, los alumnos paristas de la UNAM ampliaron sus exigencias. Entre las demandas se encuentran:
Definiciones claras y no punitivas de lo que se considera “vandalismo”
Acciones inmediatas y eficaces ante denuncias de violencia de género
Comedores universitarios accesibles y subsidiados
Apoyo institucional a las madres buscadoras de personas desaparecidas
Durante las exigencias, los estudiantes insistieron en que las reformas deben realizarse con un enfoque a los derechos humanos y con participación real de la comunidad universitaria, advirtiendo que las modificaciones institucionales no deben convertirse en herramientas de represión para la comunidad universitaria.