El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó nuevamente que impondrá aranceles del 25 por ciento a las importaciones provenientes de México y Canadá.
Su decisión, busca presionar a sus dos socios comercialespara alinearse con su agenda económica y migratoria a cambio de evitar estos impuestos aduaneros.
El mandatario afirmó que en la noche del 30 de enero decidirá si los aranceles incluyen el petróleo procedente de esos países y si el precio del barril será un factor en la determinación de los mismos.
El portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavit destacó la «cooperación histórica» entre ambos países, pero reiteró la intención de Trump de aplicar los aranceles a sus dos vecinos.
Por ello, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, aseguró que su gobierno tiene un «plan» en caso de que la amenaza se concrete.
Por otra parte, Canadá advirtió que responderá con medidas equivalentes si Estados Unidos decide avanzar con la imposición de impuestos a sus exportaciones.
Impacto en la economía mexicana
Especialistas advierten que la imposición de aranceles podría afectar significativamente a la economía mexicana, que destina el 83 por ciento de sus exportaciones a Estados Unidos.
De acuerdo con análisis de The New York Times y CNN, la medida podría provocar el cierre de fábricas y pérdidas masivas de empleos en sectores como:
Este sector, que emplea a más de un millón de personas en México, se verá seriamente afectado, ya que depende de cadenas de suministro transfronterizas.
Agricultura
México es un proveedor fundamental de frutas y verduras para el mercado estadounidense, incluyendo productos de alta demanda como los aguacates. La imposición de aranceles encarecería estos bienes, afectando tanto a productores mexicanos como a consumidores estadounidenses.
Empresas como Constellation Brands, que importa cervezas como Corona y Modelo, así como tequilas de alta gama, podrían ver incrementos en sus costos. Esto se traduciría en un aumento en los precios de estos productos en el mercado estadounidense.