La Confederación Nacional de los Municipios (CNM) de Brasil informó que, para el miércoles, en el país había un registro de 101 muertos, 130 desaparecidos y 61 mil 400 viviendas damnificadas, de las cuales, más de 6 mil quedaron destruidas totalmente.
Según la CNM, para reparar los daños causados por la tragedia ambiental reportada en Río Grande do Sul, necesitarían una inversión de al menos 6 mil 400 millones de reales (alrededor de 20 mil 928 millones de pesos mexicanos o unos mil 242 millones de dólares).
Asimismo, la Confederación mencionó que cerca de la mitad de las afectaciones –y de la cifra necesitada- están vinculadas a las pérdidas de las viviendas y los daños sufridos en ellas.
En tanto, aclaró que sus datos incluyen las cifras que, hasta el momento, han informado las alcaldías de las distintas zonas; sin embargo, apuntó a que esta es una contabilización parcial y que se necesita más tiempo para realizar un registro total de las pérdidas.
En este sentido, detalló que no todas las autoridades locales han informado sus datos debido a que han tenido dificultades por los daños sufridos y por las afectaciones a los sistemas de comunicaciones e infraestructura.
Hasta el momento, las lluvias e inundaciones en Brasil han afectado a 1.48 millones de personas en 425 municipios de los 497 que conforman el estado de Río Grande do Sul.
Respecto a esto, la CNM aseguró que, en esta zona, las actividades con mayor afectación son la agricultura –con pérdidas de 594.6 millones de reales- y la pecuaria –con 147.7 millones de reales-.
A la vez, señalaron que los daños materiales corresponden a pérdidas de hospitales, edificaciones públicas y escuelas.
Afectaciones en Río Grande do Sul tras inundaciones
De acuerdo con reportes de las autoridades brasileñas, los municipios que se han visto afectados por las inundaciones registran también daños en carreteras, tendidos eléctricos y de saneamiento e infraestructuras.
Entre estos, resaltan las afectaciones al aeropuerto y la terminal de transportes terrestres de Porto Alegre, capital del estado.
Si bien el miércoles en la mañana las autoridades informaron que el nivel de los ríos había empezado a bajar, las lluvias reiniciaron durante la tarde, lo que frenó la disminución de las aguas y paralizó las labores de rescate por parte de los bomberos.
Cabe señalar que el lunes tras las fuertes precipitaciones en el estado, el gobierno declaró estado de calamidad; aunque, para esa fecha el número de municipios afectados no era 425, sino 336.