Puebla se destaca en la gestión de esta plaga, y gracias a la inversión mencionada, se colaboró con el Gobierno de México para reunir equipos de médicos veterinarios. Además, se establecieron 18 puntos de control, independientemente de la presencia del gusano.
Estos puntos de inspección están ubicados en áreas de movimiento clave que conectan Puebla con Oaxaca y Guerrero. Allí trabajan veterinarios certificados, quienes tienen sus espacios adaptados, ya que están disponibles las 24 horas, los 7 días de la semana, comentó Ana Laura Altamirano, directora de la Secretaría de Desarrollo Rural. La mosca que afecta al ganado no respeta fronteras, lo que ha llevado a los ganaderos de Puebla a recibir capacitación sobre el manejo de sus animales. A su vez, los veterinarios llevan un maletín con medicamentos preventivos y de diagnóstico para usarlos durante las inspecciones de ganado o en rastros.
El gusano barrenador del ganado representa un problema grave que necesita atención constante y acciones efectivas para salvaguardar la salud de los animales y la economía agrícola en México. La vigilancia continua y el uso de estrategias innovadoras son fundamentales para mitigar esta amenaza.
