La presidenta mexicana Claudia Sheinbaum este jueves anunció que su gobierno ha alcanzado un acuerdo con las autoridades de Estados Unidos para que sea la Marina mexicana la encargada de interceptar embarcaciones presuntamente vinculadas al tráfico de drogas , incluso cuando se encuentren en aguas internacionales , siempre que estén cerca del litoral mexicano .
Este entendimiento se da en el contexto de recientes operativos militares estadounidenses en el Caribe y el Pacífico , que han dejado un saldo de al menos 75 muertos en los últimos meses. Según explicó Sheinbaum en su conferencia matutina, la Secretaría de Marina continuará operando con base en información compartida por agencias estadounidenses o por el Comando Sur , actuando como autoridad principal para interceptar dichas embarcaciones.
“El primer acuerdo es que siga trabajando la Marina mexicana si hay información que viene de agencias de los Estados Unidos o del Comando Sur”, afirmó la mandataria, sin precisar la fecha exacta en que se llevaron a cabo las conversaciones que derivaron en este convenio. Agregó que las autoridades estadounidenses “en principio dijeron que sí” , aludiendo a lo establecido en los tratados de cooperación bilateral .
Hasta el momento, el Departamento de Defensa de Estados Unidos no ha emitido comentarios al respecto.
Las recientes acciones militares estadounidenses han sido justificadas por la administración del expresidente Donald Trump como parte de un esfuerzo por combatir a los cárteles latinoamericanos , algunos de los cuales han sido señalados como aliados del gobierno de Venezuela . Sin embargo, estas operaciones han generado preocupación en México , ante el riesgo de injerencia en su soberanía territorial.
Sheinbaum aseguró que en fechas recientes no se han producido ataques cerca del litoral mexicano , aunque recordó un incidente ocurrido a finales de octubre en el Pacífico , a unos 830 kilómetros de Acapulco , donde la Marina mexicana acudió al rescate de un superviviente tras un ataque estadounidense. Este hecho provocó especulaciones sobre una posible colaboración operativa entre ambos países.
En respuesta, el gobierno mexicano aclaró que la acción se llevó a cabo siguiendo protocolos internacionales de salvamento marítimo , ya que uno de sus barcos se encontraba más próximo al área del incidente . Además, se indicó que fueron enviados los titulares de Marina y Relaciones Exteriores para reunirse con el embajador estadounidense en México , con el fin de establecer mejores protocolos de coordinación en las operaciones conjuntas y evitar futuros ataques, optando por interceptaciones en lugar de acciones letales .