El movimiento islamista Hamás ha comunicado su disposición a liberar a todos los rehenes israelíes , vivos o fallecidos, como parte de un posible acuerdo de intercambio de contenidos en un plan de paz presentado por el expresidente estadounidense Donald Trump , que busca poner fin a la guerra en la Franja de Gaza .
En su declaración, Hamás expresó su reconocimiento a los esfuerzos árabes, islámicos e internacionales , así como a la iniciativa liderada por Trump, que también contempla la entrada inmediata de ayuda humanitaria y un proceso de transición política en el enclave.
No obstante, la organización aclaró que está dispuesta a negociar los términos específicos del acuerdo mediante mediadores internacionales, aunque no se pronunció sobre una de las condiciones centrales del plan: su desarme , una exigencia que tanto Israel como Estados Unidos han planteado y que Hamás ha rechazado previamente.
En el comunicado, Hamás también se mostró abierto a ceder la administración de Gaza a un organismo palestino de carácter técnico e independiente, basado en un consenso nacional, con respaldo del mundo árabe e islámico.
Horas antes, Trump había lanzado un ultimátum en redes sociales, afirmando que si Hamás no aceptaba su plan antes del domingo a las 18:00 horas (hora de Washington), se enfrentaría a una respuesta militar sin precedentes.
El llamado “ Plan Trump para Gaza ” fue presentado oficialmente esta semana y cuenta con el respaldo del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu , además de potencias europeas y árabes. Consta de 20 puntos , entre los cuales destacan:
Cese inmediato del fuego y retirada gradual del ejército israelí.
Liberación de todos los rehenes por parte de Hamás en un plazo de 72 horas.
Entrega de ayuda humanitaria supervisada por la ONU.
Liberación de más de 1.900 prisioneros palestinos por parte de Israel.
Formación de un gobierno de transición en Gaza dirigido por un comité tecnocrático supervisado por una «Junta de la Paz» encabezada por Trump y el ex primer ministro británico Tony Blair .
Prohibición a Hamás y otras facciones de gobernar directa o indirectamente.
Despliegue de una Fuerza Internacional de Estabilización con participación de EE.UU., Egipto e Israel.
Rechazo al desplazamiento forzado y posibilidad futura de crear un Estado palestino .
En cuanto a temas más amplios, como el estatus final de Gaza o los derechos nacionales del pueblo palestino, Hamás indicó que esas cuestiones deberán abordarse en un marco colectivo, de acuerdo con el derecho internacional y con la participación de todas las facciones palestinas.