El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó ayer a Afganistán con que ocurrirán «cosas malas» si no «devuelve la base aérea de Bagram».
«Si Afganistán no devuelve la base aérea de Bagram a aquellos que la construyeron, Estados Unidos de América, ¡¡¡VAN A SUCEDER COSAS MALAS!!!», escribió el presidente en su cuenta de Truth Social.
Situada a unos 50 kilómetros al norte de Kabul, la base aérea de Bagram fue el centro de las operaciones de EU y la OTAN durante la guerra de dos décadas en Afganistán. La retirada de las fuerzas estadounidenses en 2021 resultó en la toma de control de la base por parte de los talibanes.
Durante su reciente visita a Reino Unido, Donald Trump dijo que Estados Unidos está «intentando recuperarla». Las declaraciones han atraído una amplia atención y han suscitado especulaciones sobre si Estados Unidos tiene la intención de volver a desplegar tropas en Afganistán.
Ayer, Donald Trump dijo a los reporteros en la Casa Blanca que Estados Unidos está en conversaciones con Afganistán sobre la recuperación del control de la base aérea, afirmando que «la queremos de vuelta, y la queremos de vuelta pronto, de inmediato».
«Si no lo hacen, van a descubrir lo que voy a hacer», dijo Donald Trump.
Gobierno afgano rechaza amenazas de EU sobre Bagram
El gobierno afgano rechazó firmemente los recientes llamamientos de Estados Unidos para recuperar la base aérea de Bagram, reafirmando su compromiso inquebrantable con la soberanía nacional e instando a Washington a honrar la promesa del Acuerdo de Doha de 2020 contra la interferencia militar, según un comunicado emitido el domingo.
«De acuerdo con los principios islámicos y basado en su política exterior equilibrada y orientada a la economía, el Emirato Islámico de Afganistán busca relaciones constructivas con todos los estados basadas en intereses mutuos y compartidos», dijo el portavoz adjunto de la Administración, Hamdullah Fitrat, en un comunicado publicado en su cuenta de la red social X.
La declaración destaca que la independencia y la integridad territorial de Afganistán siguen siendo primordiales en todos los compromisos bilaterales, particularmente con Estados Unidos.
“Debe recordarse que, en virtud del Acuerdo de Doha, Estados Unidos se comprometió a que ‘no usará ni amenazará con la fuerza contra la integridad territorial o la independencia política de Afganistán, ni interferirá en sus asuntos internos'», reza el texto.
El Gobierno afgano pide a Washington que cumpla con estos compromisos.
La respuesta sigue a las declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump en Londres el jueves, donde expresó su intención de «recuperar» la base aérea de Bagram.
Los funcionarios afganos condenaron rápidamente los comentarios. El mulá Tajmir Jawad, primer adjunto de la Dirección General de Inteligencia, respondió a los llamamientos de Estados Unidos para recuperar el aeródromo estratégico diciendo que el Gobierno afgano preservaría el sistema actual.
La Base Aérea de Bagram, situada a unos 50 kilómetros al norte de Kabul, sirvió como epicentro de las operaciones de Estados Unidos y la OTAN durante la guerra que duró dos décadas. (
