El FBI y el Departamento de Justicia confirmaron que, pese a las teorías de su asesinato, el infame multimillonario y criminal sexual, Jeffrey Epstein, se quitó la vida. Igual negaron la existencia de la supuesta «lista de clientes» que le pedían los servicios sexuales de menores de edad al hombre.
Este anuncio se da después de que el presidente de Estados Unidos, y cercano amigo del criminal sexual, Donald Trump, pidiera que se aclarara el caso. Se presume que con esto buscan acallar las teorías de conspiración que rodean el caso, sobre todo los nexos del mandatario con el caso.
Con esto, el Departamento de Justicia descarta de momento investigaciones o imputaciones en relación con el caso al considerar que no existen pruebas contra terceros. Esto implica que figuras como Donald Trump, Bill Clinton y Andrés de Inglaterra no serán investigadas.
Esto se da a pesar de que la Fiscal General de Estados Unidos, Pam Bondi, aseguro que buscaba publicar los documentos y también dijo que presuntamente tenían en su posesión videos que demostraban la complicidad de varias figuras poderosas que tenían negocios con el hombre.