Un tornado sorprendió a la comunidad de Llanetillo, en el municipio de Chignahuapan, y dejó una serie de daños materiales en viviendas, invernaderos, vehículos y estructuras agrícolas. A pesar de la intensidad de los vientos, no se reportaron personas heridas ni fallecidas.
El fenómeno, que se registró la tarde-noche del sábado, causó afectaciones en al menos cinco invernaderos, una hectárea de cultivo y 13 construcciones, entre las que se contabilizaron viviendas, bardas, galeras, un taller y techos colapsados. Protección Civil estatal y municipal realizaron un recorrido para verificar los daños.
Durante las inspecciones, las autoridades confirmaron que seis viviendas presentaron desprendimiento de láminas y, aunque algunas estructuras fueron alcanzadas por la fuerza del viento, los daños no comprometieron su estabilidad. Además, dos vehículos resultaron dañados por objetos arrastrados por el tornado.
Las autoridades informaron que canalizarán recursos para atender a las familias afectadas y apoyar en la rehabilitación de sus hogares e instalaciones productivas.
El paso del tornado por Llanetillo ocurrió apenas días después de que otra comunidad de Chignahuapan, Ajolotla, fuera azotada por una tromba que provocó pérdidas en viviendas, animales de granja y cultivos. Asimismo, las intensas lluvias también impactaron a los municipios de Tepeojuma e Izúcar de Matamoros a inicios de junio.
Por el momento, las autoridades mantienen presencia en Llanetillo para brindar apoyo y supervisar que no existan riesgos adicionales. Mientras tanto, se recomendó a la población estar alerta ante cualquier cambio climático inusual y seguir los protocolos de seguridad.