El Poder Judicial de la Federación (PJF) ordenó a la Secretaría de Educación Pública (SEP) llevar a cabo la evaluación PISA en el país, luego de que la asociación Educación con Rumbo, dirigida por Paulina Amozurrutia, interpuso un juicio de garantías para evitar que México quedará fuera de el programa de evaluación.
Se confirmó que la prueba PISA se realizará de manera íntegra hasta el próximo año, durante los meses de abril y mayo, en colaboración con el Centro Nacional de Evaluación para la Educación Superior (CENEVAL); el próximo mes de octubre se realizará una prueba piloto.
Dicha prueba se llevará a cabo durante la segunda quincena del mes. Participarán cerca de dos mil 790 estudiantes provenientes de 31 escuelas del Estado de México, Hidalgo y Tlaxcala.
Paulina Amozurrutia exigió al Gobierno Federal realizar la prueba en total transparencia, ya que acusó éstas incumplieron en ediciones pasadas con varios acuerdos relativos a la educación en el país.
“El resultado [que tendremos] no será excelente, pero la situación que vive nuestro país necesita números y seguiremos exigiéndolos”, afirmó en entrevista con Marco Silva, para Grupo Fórmula.
El gobierno mexicano, que encabeza Andrés Manuel López Obrador, criticó la prueba PISA y la consideró un instrumento de evaluación que no refleja adecuadamente la realidad educativa del país, ya que, acusaron, está alineada con una agenda neoliberal por lo que no se aplicó en el país desde 2022.